viernes, 1 de febrero de 2013

Quisiera consolar tu eterna risa
Borrar tu cruel y cárdeno dolor
Tu infatigable surco del amor
Ardiente sed y abrasadora brisa

 
Quisiera detener tu loca prisa
Frenar ya para siempre tu valor
Tu insaciable anhelo de calor
Locura vana que tu mal avisa

 
Quisiera tantas cosas para ti
Inconsecuente y loco compañero
De todos los instantes que viví

 
Que el ver que sólo soy tu prisionero
Produce tan gran confusión en mí
Que pierdo la noción de lo que quiero

 
         Palamós     octubre de 1962

1 comentario:

  1. Hace reflexionar este poema. Es como si estuviese escrito a ti mismo. Es diferente a lo que sueles escribir. Está muy bien...

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