miércoles, 18 de noviembre de 2020

 


    Vanidad de vanidades


Rodeado de problemas

Casi exhausto

Fue mi tiempo transcurriendo

Con ese ansia un tanto mórbida

De subir hasta el cenit

Sin descanso ni sosiego


Era el infantil anhelo

Inexperto y presuntuoso

De ya veréis cómo yo llego

Ahí arriba solo están

¡Esperándome!

Las nubes y el cielo


Hoy con muchos lustros encima

De vicisitudes pleno

Solo sé que de tu vida los sucesos

Contemplados con detenimiento

No son de tanta importancia

Y sí tienen mucho de esperpento



     Madrid 18 de noviembre de 2020

2 comentarios:

  1. La ilusión que hace crecer y ser mayor cuando eres pequeño, y lo relativo que es todo, que llega con la madurez. Sabias palabras estupendamente contadas pater.

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  2. Papá, la primera estrofa me parece colosal. Espectacular. Cuánto describes en solo 6 versos! Lo de subir hasta el cenit, qué bueno!!
    y la segunda estrofa, qué bárbara, por no hablar de la tercera. Me ha encantado papá. de verdad. Creo que de las que más más me ha gustado últimamente.

    y me encanta esa templanza que respiras y contagias, ese saber que las cosas, vistas con perspectiva y madurez, no son tan terribles.

    Un abrazo enorme papá. ¡Qué arte tienes!

    ¡Corre a por otra que estás en racha!!!

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