I
Vivir a tu lado
Es como respirar
Sentir la yerba del prado al despertar
Ver cómo tú, mi ser amado,
Inundas por completo nuestro hogar
Buscando siempre el agrado
De soñar y soñar
II
Cuando te conocí
Mi mente avariciosa
Solo pensaba en
ti
Y no quería otra cosa
Que tenerte para mí
Y adorarte como a una diosa
III
Embrujándome por entero
Tu piel resultó la clave
Cual un dardo muy certero
Rotundo, mágico y grave
Que en el instante primero
Ancló por siempre mi nave
De amor fructífero, sincero.
Fue solo tu piel, tu piel suave.
Madrid
16 de marzo de 2018
Qué bien leerte otra vez papá.
ResponderEliminarMe ha encantado el final. Qué sencillo y rotundo a la vez.
Sigue por favor, que me gusta muchísimo leerte
un beso de hijo poniendose al día
ResponderEliminar