El cantueso
Tu piel me olía a lavándula
Con aroma de cantueso.
Como un cuento
de hadas
El perfume de tu cuerpo
Inunda mi noche amarga
Con fragancia de los besos
Que aún en mi frente estallan
Convirtiéndose en recuerdo
De lo que en mi vida pasaba
Todo es solo fugaz destello
Porque no me queda nada
Sino las sombras del sueño
De tener mi mente extasiada
En la magia de aquel tiempo
Con un olor como a albahaca.
Madrid
19 de diciembre de 2017